Estamos en tiempo de distancias, de
espacios libres y cuidados extremos. Quizás no sea suficiente, pero es la
realidad que tenemos y que nunca creíamos que íbamos a tener.
Desde este pensar me atrevo a “colgar” tres rutas simples sencillas y poderosamente manchegas, donde los atardeceres
otoñales de sol “apretao” manchego son aprovechables.
Primera Ruta, como la que le sigue
corta, pero entretenía, donde los rayos solares son aprovechables y quizás el
andar pausado te hace ver que no necesitas más. Que sólo pides paz, sosiego,
tranquilidad y si es posible salud, porque el tormento ya te lo dan otros y
otras.
Cueva de Castrola, el bandolero más
famoso que La Mancha dio (Constantino Chacón Velasco, ha dejado escrito un libro novelado titulado “Castrola, el bandolero de los montes de Toledo). La
ruta parte de la Ermita de Valdehierro, en la sierra de Madridejos,
estribaciones últimas de los Montes de Toledo.
A poco más de 800 metros comienza
una subida empinada, quizás algo penoso para el no habituado, pero soportable
con tranquilidad. Su culmen finaliza en la Cueva de Castrola. Después de las
fotos de rigor, podemos volver por el mismo camino, pero invito a hacerla circular y
tras tener una amplia perspectiva iniciamos una bajada por un corta fuegos que nos lleva hasta la
Ermita del Valdehierro.
Con tranquilidad son dos horas que
merecen la pena.
Segunda ruta, La Mancha Húmeda,
aunque hoy en su corazón están extremadamente secas y en franca desolación,
todavía nos ofrecen infinidad de oportunidades, donde la vista nos confunde con
posibilidad de agua o infinitos desiertos cubiertos por rayos solares.
Esta vez son las Lagunas de Alcázar
de San Juan. Partiendo desde el observatorio de la Laguna de la Veguilla,
transitamos por caminos de un rojo entristecido y siempre dejando la Laguna del
Camino de Villafranca a la izquierda para llegar a un pinar, donde dejando la
señalización de la Ruta el Quijote, podemos ver la inmensidad temporera de unas
lagunas de impoluto blanco. Podemos rodearlas y ampliar el recorrido, pero esta
vez la tarde otoñal de hora cambia nos obliga a tronchar por el vaso lagunar,
donde el polvo salitroso cruje y gruñe.
Ruta sin dificultad, donde el
silencio de los últimos rayos traiciona las últimas bandadas de cigüeñas que
buscan el descanso.
Tercera ruta, Lagunas de
Villafranca en La Mancha Húmeda, la inmensidad salitrosa de la laguna Grande
ciega la vista. Es una ruta fácil donde rodear el sistema lagunar de
Villafranca hace ver un mar lunar en la laguna Chica, donde construcciones artesanales
naturales salitrosas brotan de su agotado vaso, y tras cruzar la pasarela, y
dejarte embrujar por la intensidad de gamas de colores de la puesta de sol, desembocas en la lagunas Grande donde
las feroces fauces de masas arbóreas engullen un terreno donde quizás se
ha dado por perdido.
Nuevos tiempos e inesperados, donde
el campo abierto nos quiere dar una nueva oportunidad. Aprovéchalo!!!
Track Ruta Circular Cueva de Castrola (5,5 Km):
Track Ruta Circular Laguna Camino de Villafranca (6 Km):
Track Ruta Circular Lagunas de Villafranca (9,5 Km):