"Un obrero, de manera tímida pedía
subida salarial a su amo y empresario, justificando que apenas llegaba a fin de
mes. El empresario, indignado y utilizando voz altisonante, remarcando los
motivos de su exposición, le decía – Como te atreves a pedir subida salariar.
Tú sabes los gastos que tengo que soportar-, con esto no sólo alegaba los impuestos y gastos de
mantenimiento de la empresa, sino que también el colegio de sus hijos en el
extranjero, sus viviendas, su yate y un montón de exigencias sociales que le
obligaban su superior estatus. El obrero, agacho las orejas y pensativo se fue,
dando gracias por tener como único problema llegar a fin de mes con sus pagos
más básicos: Luz, comida y algún que otro seguro."
Quizás me meto en lo que no me
afecta o sí. El caso es que voy a opinar sobre lo que considero un abuso de los
fuertes sobre los débiles, me refiero a la situación de indefensión y
menosprecio que sufren los corredores populares ante decisiones interesadas,
sin tener en cuenta la base con la que se sustenta este tipo de grandes eventos
deportivos, y me refiero a las carreras populares y en concreto a la Maratón de
Málaga que parece que se quiere posicionar entre las más importantes de España.
Sin embargo, para mí, no cabe otra cosa que decirle a sus organizadores que son
un fiasco y con sus decisiones han ninguneado a todos y cada uno de los
inscritos en la VII Maratón Popular de Málaga
El Sur de España bastantes días antes
del día 4 de diciembre se encontraba azotado por fuertes lluvias, es más los
daños eran visibles y los estaba sufriendo parte de sus habitantes. Días
anteriores a la celebración de la VII Maratón de Málaga estaba declarada la
zona en alerta Naranja, este nivel se declara pocas veces y su significado es
que existe riesgos reales de importantes daños personales y materiales.
Mientras esto ocurría, cientos de
atletas populares que soportando una inscripción de 65€, más, en mucho de sus
casos, largos desplazamientos y alojamientos, sin olvidar la parte de reto que
cada atleta lleva sobre sí, sustentados en duros, pesados y sacrificados
entrenos. Estos atletas populares inscritos en ningún momento recibían la
mínima información de una remota posibilidad de suspender la prueba u otras
alternativas posibles para afrontar lo que meteorológicamente era como
posibilidad más probable: Agua a mares, con posibilidad de inundaciones y
riesgo cierto para personas y bienes materiales.
Me atrevo a decir que el 95% de los
inscritos son auténticos corredores populares, es decir obreros de estas
masificadas carreras, que lo único que buscan de ellos es utilizarlos como
rimbombantes cifras de participantes.
Dicen que desde hace más de 30 años
en Málaga no habían tenido una situación como esta. Seguro que es cierto, pero
también es cierto que desde aquellos años 80 hasta estos del años 2000 casi 20
hemos avanzado mucho, incluso la predicción es infinitamente más exacta (Que os
voy a decir yo, que este "finde" he suspendido una ruta a Gredos por predicciones
meteorológica que me marcaban cada minuto la variación del tiempo).
La Maratón de Málaga está
respaldada por un gran Ayuntamiento, los sponsores son de renombre y fuerza, la
cuota de inscripción es para quitarte el hipo. ¡Vamos!, la VII Maratón de
Málaga está muy bien respaldada, pero afirmo categóricamente que no han sabido
estar a la altura de las circunstancias. Han tratado al corredor popular con
desprecio, les ha importado un comino su esfuerzo económico y desde días antes del comienzo de la prueba han escondido
la cabeza bajo tierra para negar la realidad y quedarse los “cuartos” de los
corredores populares en el bolsillo. Han sido despreocupados, no se han
anticipado y no han informado convenientemente, en definitiva los corredores
para la organización de la VII Maratón de Málaga les ha importado un pito.
Una organización seria y respetuosa
con el atleta (doblemente sacrificado: Por esforzado entreno y fuerte
desembolso económico), conoce sus motivos y necesidades y saben que a un
corredor popular le debe guardar el máximo respeto, siendo honrado en sus
decisiones que afectan al corredor
popular y utilizar el buen talante para augurar un buen futuro a la prueba
ofreciendo como primera opción la devolución de la inscripción a todos los
inscritos, porque muchos de los que no recogieron el dorsal si sabían lo que se
le venía encima y por eso no se desplazaron hacía Málaga.
Resumiendo a los atletas populares
inscritos en la VII Maratón de Málaga la organización les ha importado tres
pitos.
